martes, 2 de junio de 2009

Bioenergética: ¿Qué duele y qué significa?


Cuando el cuerpo humano presenta un síntoma físico, hay una vinculación emocional que le está indicando a la persona que hay un tema interno que solventar. La Bioenergética ayuda a mirar el nexo que hay entre los signos que se presentan y su relación con el mundo interior del paciente.

El cuerpo físico de una persona almacena y contiene mucha más información de la que se puede observar a simple vista. Incluso, la salud de un organismo vivo no sólo está vinculada al funcionamiento adecuado de sus órganos, sino al manejo de sus emociones.

El cuerpo y las emociones están relacionados intrínsecamente. En el primero, se pueden manifestar las alteraciones del mundo emocional; y según como cada individuo maneje sus emociones, habrá síntomas o no en la parte física.

Gabriel Rodríguez, Terapeuta Bioenergético, comenta al respecto: “Si la persona manifiesta su emoción reaccionará con salud”. En este sentido, explica que los problemas comienzan cuando la persona elige no mostrar lo que sucede por dentro.

Llegan los síntomas

El terapeuta consultado explica que cuando la salud orgánica pierde el equilibrio, se comienzan a manifestar síntomas conocidos como enfermedades. “Es lo que da el mensaje de que algo en nuestro organismo requiere un ajuste”, dice Rodríguez.

Gabriel Rodríguez hace la diferencia entre la salud orgánica y la social. En la primera, el organismo toma del ambiente lo que le sirve y se nutre. Lo que no le sirve, lo excreta. En la segunda, la persona toma del ambiente lo que le nutre, pero no puede eliminar todo lo que desea por condicionantes sociales.

En el proceso de socialización y educación del individuo, el cuerpo es reeducado y aprende a no extraer de su organismo aquello que no le sirve. “Preferimos funcionar bajo la visión de la salud social, de lo que es correcto”, indica el entrevistado.

¿Cuál es la salida más común cuando aparecen los síntomas? Lo que suele suceder es que las personas se molestan con la enfermedad y atacan al síntoma, en vez que alegrarse porque su cuerpo les está mostrando que algo no anda bien. “Es como si cuando vas manejando, se enciende la luz del tablero indicando que el carro necesita aceite, y el conductor en vez de echarle el líquido, rompe el bombillo”, cuenta Gabriel Rodríguez.

La energía en el cuerpo

Para comprender cómo la salud o su ausencia están vinculadas con las emociones, se puede utilizar la Bioenergética, que Rodríguez define como un modelo terapéutico que estudia el equilibrio energético dentro del cuerpo. “Si existe un bloqueo de energía en la persona, éste quedará fijo en el cuerpo y a la vez moldeará su carácter o personalidad”, señala el entrevistado.

Cuando se trata de las dolencias físicas, es importante mirar los síntomas, cómo afectan al paciente y cómo se vincula con su entorno y sus relaciones.

El experto en este tema comenta que la Bioenergética permite mirar todas las enfermedades e incluso los accidentes en la historia de vida de la persona.

En este sentido, comenta: “Si una persona enferma en soledad es porque extraña esa relación. Si presenta síntomas estando con otros, es porque las relaciones no son sanas para él. Detrás de toda patología, hay una relación en déficit. Incluso, puede decirse que lo amenazante puede ser asumir el vínculo”.

Principios de la Bioenergética

De acuerdo al abordaje en Bioenergética, dos principios fundamentales rigen y explican los síntomas que se manifiestan en los seres humanos.

El primero, es el principio de lateralidad. En el lado izquierdo del cuerpo se reflejan las relaciones familiares significativas: padre, madre, hermanos, hijos. En el caso del lado derecho, se muestran las sociales: vecinos, pareja, amigos, trabajo. Esto quiere decir, que dependiendo del lado donde se presenta el síntoma, habrá ue revisar una vinculación familiar o una social.

El segundo principio es el de verticalidad, según el cual en cada zona del cuerpo se reflejan diferentes aspectos.

En la cabeza, se mira lo abstracto, las ideas, lo fantástico. En esta parte del cuerpo tengo mi identidad, mi ego, mi imagen.

Los síntomas entre cuello y cintura, pueden estar vinculados a la vitalidad y a los afectos. “Allí tengo los órganos que necesito para estar vivo, como el corazón y los pulmones”, dice Rodríguez.

Entre la cintura al vientre (parte baja del tracto digestivo), se manifiestan los temas que tienen que ver con los desechos, eso que no sirve o no es nutritivo, eso que debe permanecer poco tiempo en el cuerpo.

Los temas de identidad sexual, pasión, capacidad de trascender, miedos y profundos sentimientos se manifiestan en la zona de los genitales.

Las piernas hablan del soporte, el contacto con la realidad y con lo concreto. Mientras que los brazos son los que le permiten a las personas proyectarse al futuro, sin perturbar si equilibrio. Con ellos, se puede colocar distancia o acortarla.

De acuerdo al especialista consultado, para realizar el trabajo desde el abordaje de la Bioenergética, es necesario construir la historia de vida con el paciente y revisar desde allí y desde la observación, cuáles son los bloqueos energéticos que tiene la persona, para poder trabajarlos y desbloquearlos con ejercicios terapéuticos.



Según el lugar

De acuerdo a la parte del cuerpo donde se presenta el signo, habrá una explicación emocional para el mismo. Un breve resumen lo confirma.

* Muslos: tiene que ver con los demás esperan de mi o lo que yo creo que los demás esperan de mi.
* Pantorillas: vinculado a lo que yo espero de mí mismo.
* Rodilla: tiene que ver con cómo articulo las expectativas externas y las internas.
* Tobillo: cómo vinculo mis expectativas con la realidad.
* Pie: habla del apoyo, soporte y equilibrio.
* Cuello: relacionado con el control y con conciliar lo que se siente y se piensa.
* Garganta: puede manifestar problemas para comunicarme.
* Prolapso de bajo vientre: reconcomio.
* Frente: tiene que ver con cómo la persona enfrenta el mundo.
* Espalda: en esta parte, se refleja la historia de vida del paciente, desde la cadera hasta la séptima vertical. En la cadera, se encuentra el día de nacimiento. Y en la cervical, el presente.
* Corazón: problemas emocionales básicos, de afectos primarios.
* Dientes: vinculado a cómo se asimila el mundo.

Según los síntomas

Los signos que se manifiestan también contienen información tanto para el paciente, como para el terapeuta. A tomar nota.

* Gripe: llanto interno. Se presente cuando no la persona no se da el permiso a llorar o no puede manifestar ciertas realidades.
* Dolores de cabeza: se resume en pensar, pensar, pensar y no hacer.
* Dolores musculares en la zona del trapecio: está vinculado a las responsabilidades. La persona se echa el mundo encima.
* Dolores musculares en la zona lumbar: vinculado a no querer ceder o ser inflexible.
* Infarto: habla de cómo la emoción pudo más que la persona.
* Cáncer: el trasfondo es la desesperanza. Cuando hacer más de lo mismo ya no le sirve a la persona.
* Cáncer seno izquierdo: frecuente cuando se presenta el síndrome de nido vacío (los hijos se marchan del hogar)
* Cáncer seno derecho: vinculado al abandono de la pareja.
* Cáncer cuello uterino: problema con lo femenino.



Autor del texto: Raiza Ramirez
Terapeuta consultado: Jose Gabriel Rodríguez.

OBESIDAD COMO MECANISMO DE DEFENSA FÍSICO Y EMOCIONAL.


La grasa o tejido adiposo: tiene múltiples funciones en el organismo y cada vez es considerada como más valiosa y necesaria para su óptimo y correcto funcionamiento.

Dentro de sus funciones principales podemos encontrar:
• Mediante el aislamiento térmico, la grasa protege a los órganos internos (riñones, intestinos) frente a impactos físicos.
• Sujetan y protegen órganos como el corazón y los riñones.
• Resguarda el organismo cuando ocurren perdidas excesivas de agua y calor.
• Es un componente fundamental de todas las membranas celulares. (pues las ellas tienen cadenas bifosfolípidica)
• Influye en la regulación de la presión sanguínea, la coagulación y la función sexual.
• Entre otras importantes funciones orgánicas

Sin embargo, a nivel emocional y como estructura de las corazas, encontramos que la grasa es la protección ante el entorno hostil o vivido emocionalmente como tal. La acumulación de tejido adiposo servirá para aislarme del entorno, para simbólicamente proteger mis afectos, resguardarme de eso que me hace daño, me sirve como forma para mediatizar el contaco.

Reich habla de las corazas caracteriales como una tensión que se hace habitual y se instala, no vivimos el cuerpo sino la armadura; con la armadura se corresponde:
• una personalidad (entendido como una forma casi estereotipable de actuar y reaccionar ante los estímulos del entorno con sus miedos y con sus actitudes – que Riech define como Caracter).
• una historia de vida (que Riech refiere como etiología).

Riech decía que los cuerpos son hermosos, únicos, intransferibles; a veces se protegen con una coraza de grasa y se la quitan si no están estresados. No todos los trajes cubren el cuerpo entero; sólo se cubren las áreas que se consideran vulnerables; en función de la ropa y de la defensa ante agentes exteriores.

El traje de oso: que cubre tronco, brazos, piernas a veces cubre manos y pies como calcetines y guantes; al igual que la pijama infantil, lo utilizan las personas con hábitos infantiles, faltos de amor incondicional, ven al mundo frío; la gordura genera crítica, refuerza la coraza.

El pantalón de montar: lo usan las mujeres que se cuestionan en su capacidad; temen a la dura carga de las responsabilidades. En los muslos, los músculos más fuertes del organismo se cuestiona los refuerzos y la capacidad de cumplir con las expectativas de los demás y de movernos acorde ello. La realidad emocional es que quiere pasar por fuerte ante los demás.

La coraza panty: lo usan las mujeres que necesitan afianzar su feminidad. Para ello exageran las caderas y las nalgas pero sin embargo, tiene un pecho que luce de joven pero con caderas de matrona. Los brazos son largos para alcanzar lo que quiere y los rasgos de matrona para defenderse de ser atractiva.

La coraza camiseta: llevada por ambos sexos predomina en hombres que la lucen sobre el torso, mas sin embargo el propietario tiene piernas y caderas finas. Su intención principal es la de impresionar y demostrar fortalezas. Ellos aspiran que no se note la débil base, cubren su inseguridad interna con métodos expansivos y dominantes.

El Peto: predominantemente en hombres luce como la tradicional “barriga cervecera”. La utilicen para proteger su vulnerabilidad de un ataque (corazón, pulmones, estómago). Algunas de sus guerras competitivas; acompañadas de grasa en hombros son para sostener al mundo. Ellos creen que es seguro de seguridad, prosperidad y saber vivir.

Las corazas salvavidas: abarca la cintura predomina en los hombres de actitud flotante, los lleva la corriente, agradables, ganan amigos fácilmente, tienen miedo subyacente, como se justifica sino llevan un salvavidas en tierra firme.

La coraza camiseta: llevada por ambos sexos predomina en hombres que la lucen sobre el torso, mas sin embargo el propietario tiene piernas y caderas finas. Su intención principal es la de impresionar y demostrar fortalezas. Ellos aspiran que no se note la débil base, cubren su inseguridad interna con métodos expansivos y dominantes.

El Peto: predominantemente en hombres luce como la tradicional “barriga cervecera”. La utilicen para proteger su vulnerabilidad de un ataque (corazón, pulmones, estómago). Algunas de sus guerras competitivas; acompañadas de grasa en hombros son para sostener al mundo. Ellos creen que es seguro de seguridad, prosperidad y saber vivir.

Las corazas salvavidas: abarca la cintura predomina en los hombres de actitud flotante, los lleva la corriente, agradables, ganan amigos fácilmente, tienen miedo subyacente, como se justifica sino llevan un salvavidas en tierra firme.

Las Medias: Llegan a diferentes alturas, tobillos, rodillas, ingle, cubren tensiones profundos. Van debajo de los músculos duros como piedras. Lo llevan las personas que se creen realistas de pensamiento concreto más que fantasioso. Parecen que pisan tierra, pero en realidad se defienden de ello

Los Vellos o pelos, compuesto por El folículo piloso es la parte de la piel que da crecimiento al cabello al concentrar células madre. Dentro de los folículos existen glándulas sebáceas, destinadas a la producción del sebo que lubrica la superficie del cabello y que están distribuidas por toda la superficie de la piel con excepción de las palmas de las manos, plantas de los pies, etc.

A mayor grosor del cabello, más glándulas sebáceas se encontrarán. En la base del cabello, una fina red de vasos sanguíneos forma la raíz del mismo. Alrededor de esta hay una estructura blanca llamada bulbo, visible al arrancar cabellos sanos

Entonces cuando hacemos dietas o ejercicios y efectivamente perdemos peso, realmente lo que estamos haciendo es funcionando de manera mas armónica y menos defensiva con el entorno. Lo que estamos haciendo es quitándonos una coraza.

LATERALIDAD Y SU SIGNIFICACIÓN EMOCIONAL



Al hablar de lateralidad hacemos referencia a grandes zonas, estas áreas de significación permanecerán presente a lo largo del cuerpo sumando valor a la interpretación que hagamos de la lesión o zona de estudio.


El primer criterio de análisis considera la lateralidad que conocemos como “lateralidad básica” y plantea la siguiente:


En el lado Izquierdo: encontramos al corazón y por ello diremos que nuestras emociones profundas. Inicialmente las perspectivas hindú y asiática lo relacionan con lo femenino, además se le vincula o identifica como el lado afectivo o emocional. Sin embargo, las emociones contenidas en este lado solo refirieren a la familia, específicamente a los lazos consanguíneos. Cabe acotar, que cuando hablamos de familia hacemos referencia principalmente a padres, hermanos e hijos y posteriormente a aquel familiar cuya significación emocional causa impacto en la persona debido a presencia y recurrencia de contacto.


En el lado Derecho: encontraremos representado a lo social. Entendiendo por social a nuestros amigos significativos, el colegio o ambiente de estudio o el trabajo, vecinos según sea la edad y finalmente a nuestra pareja, ya que la pareja es el más cercano y significativo de nuestros amigos y proviene del entorno.


La diferencia principal que existe entre ambos lados radica en el hecho de que las relaciones consanguíneas son sempiternas y las sociales son finitas. De hecho en muchos de los casos las relaciones sociales significativas viene acompañadas por ritos que indican que se inició y se culmina dicha relación. Por ejemplo, el matrimonio y el divorcio o la firma de un contrato y la carta de despido.


Es de suma importancia entender que por profundo que sea el amor a la pareja, su significación invariablemente se reflejará del lado derecho. Particularmente cuando hablemos de casos como el cáncer de mama y otros similares. Si bien no hay estudios específicos sobre la significación emocional y la huella de su impacto en el caso de las personas que sufren de dextrocardia. Todo pareciera indicar, por la misma naturaleza de la condición, que la significación se mantiene pero al lateralidad de invierte. Es decir que encontraremos que la referencia o el impacto que generen las situaciones familiares se reflejará como salud o un equivalente patológico del lado derecho de la persona, quedando en este caso en el lado izquierdo todo lo que refiere a lo social.


Esto se debe a que la dextrocardia es una enfermedad cardiaca de origen genético. Como bien es sabido, el corazón se sitúa en el lado izquierdo del cuerpo, sin embargo, en esta malformación, ese orden es alterado y el corazón se ubica en el lado derecho del tórax. Ocurre durante la cuarta semana del desarrollo embrionario, cuando el tubo cardiaco primitivo se dobla a la derecha cuando normalmente debería doblarse a la izquierda.


La dextrocardia generalmente viene acompañada de una anomalía llamada situs inversus que consiste en que los órganos se encuentran en lado opuesto al que deberían estar, esta situación afecta solamente a los órganos impares y que se encuentran en un lado determinado del cuerpo, por ejemplo, el hígado, el páncreas o el estómago, en el caso del intestino grueso, el ciego se encuentra en el lado opuesto. Pero también puede ir asociada con situs ambiguus. En este caso puede ser sólo uno de los órganos el que se encuentra invertido, y los demás se encuentran en sus posiciones normales.


Esta es la única excepción a la regla en lo que a lateralidad refiere, salvo lo aquí comentado, todas las disfunciones o lesiones emocionales que se tengan a nivel familiar se reflejaran del lado izquierdo y todas aquellas que provengan del entorno social, en el lado derecho.


Sin embargo hay que ser cautelosos a la hora de hacer interpretaciones pues puede ocurrir que ante una ruptura de pareja, la que todavía no ha tenido descendencia, la persona evidencie lesiones del lado izquierdo. Esto se debe a que para el o ella la ruptura se vive no solo como la perdida de la pareja, sino como la imposibilidad inminente de tener familia y eso es lo que afecta mayormente y se manifiesta psicopatológicamente.


Por otro lado, tenemos muy arraigado en los procesos del pensamiento y concepción, casi podríamos decir que forma parte del inconsciente colectivo Junguiano, la idea de linealidad temporal. Partiendo de este principio en nuestro cuerpo debe haber huellas de nuestro pasado, nuestro presente y proyecciones de nuestro futuro. Sin embargo, en el cuerpo sólo existe un tiempo, presente subjetivo y como tal no existe el pasado ni el futuro. Vale decir, del pasado sólo conservamos aquello que todavía guarda significación para nosotros ya sea como destreza o como trauma.


Entender y aceptar este principio nos da la potestad liberadora y la opción de conservar, modificar o erradicar dicha significación, permitiéndonos optar por la salud o simplemente por otras alternativas que no sean dolorosas para el individuo. Entonces, suponiendo que se pudiera trazar un meridiano que me divida el cuerpo en dos mitades y una de estas mitades refiera al frente y otra a la parte de atrás.


En la parte trasera de nuestro cuerpo encontraremos representado nuestros aprendizajes, nuestra historia o más bien lo que conservamos de ella, los valores que nos mantienen erguidos y la representación de nuestras capacidades y expectativas; así como también las marcas o lesiones de experiencias traumáticas no superadas.


Delante, en consecuencia encontramos representado nuestro presente. Como nos vemos y nos vivimos hoy, nuestra imagen, nuestras creencias, nuestras ideas, nuestros afectos significativos, nuestras defensas principales y nuestras vulnerabilidades (evidenciadas como lesiones o cicatrices.)


Aquí encontramos también la parte de nuestro cuerpo que nos permite proyectarnos al futuro y alcanzarlo o también poner distancias y límites. Sin embargo, cuando hablamos del conjunto formado por los hombros, los brazos y las manos, la significación de los mismos siempre estará en presente subjetivo y nunca en futuro, pues como tales ellos originalmente se posicionan a ambos lados del cuerpo y cuando mucho pueden proyectarse hacia delante, mas efectivamente nunca se alcanza el futuro y solo se vive el presente, el aquí y el ahora.