jueves, 29 de septiembre de 2011

Ojos que no ven, corazón que no siente. Cuarta entrega. Presbicia, la testarudez como enfoque.



Para ir cerrando momentáneamente el tema de las patologías visuales, les hablaré sobre la presbicia. Anteriormente, con saber cual era el efecto que causaba una patología visual podíamos saber, a grandes rasgos, de que se trataba la misma. Sin embargo, en el caso de la presbicia es diferente.

 Es decir, un miope tiene dificultad para ver de lejos y, emocionalmente hablando, le cuesta proyectarse a futuro. Por lo tanto, como puede ver muy bien de cerca es muy eficiente reconociendo su entorno inmediato y lo que en el ocurre. En contraposición, el hipermétrope ve muy bien de lejos pero se le dificulta la visión inmediata y el eco emocional es inverso al anterior, es por ello, que se proyecta a futuro con gran eficiencia pero puede desconocer o dejar de percatarse de lo que ocurre a su alrededor.

Ahora, la presbicia se presenta como una dificultad para ver de cerca y a su vez permite con más eficiencia la visión a distancia, entonces, en que se diferencia de la hipermetropía? La respuesta radica en la fisiopatología, ya que la hipermetropía es un problema de curvatura en el cristalino, en cambio, la presbicia es un problema de elasticidad del mismo.

En consecuencia, con el paso del tiempo o por el paso del tiempo, el cristalino va perdiendo sus propiedades elásticas que permiten el enfoque de objetos cercanos, lo que desde el punto de vista emocional significa que las personas con Presbicia van madurando sus criterios y fortaleciendo sus puntos de vista, suena lógico y simple!

Con la madurez, sobrevienen responsabilidades, hijos, trabajos y demás que van a demandar que el individuo fije posiciones y asuma puntos de vista cada vez más rígidos, muchas veces tan estables, que se vuelven simplemente estáticos, he aquí el problema.

Es entonces que comienzan a aparecer esas frases célebres de “en mis tiempos...”, “antes las cosas eran diferentes…”,”esto jamás hubiera ocurrido allá y entonces…”,”todo tiempo pasado siempre fue mejor…” Y eso es simplemente un reflejo del apego del individuo a esa imagen de sí y de sus recursos en ese momento. Es por ello, que alrededor de los 45 años comienza en la mayoría de los casos a aparecer la presbicia.

Simbólica y estadísticamente hablando, digamos que el hipermétrope está, más bien, centrado en el futuro, el miope en el presente y lo inmediato y la persona con presbicia se va centrando cada vez más en el pasado y lo que representa.

Así que la mejor manera de retardar la aparición de la presbicia, desde el enfoque bioenergético, será mantenernos abiertos a las nuevas tecnologías, opciones, formas de hacer las cosas ahora, mantenernos activos y en contacto con respecto a cómo se hacen las cosas hoy en día y sacar provecho de ello y dejar el pasado atrás tomando de el solo lo que nos nutre en vez de procurar traerlo al presente y revivirlo.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Te ZEN para reflexionar


Queridos amigos, aquí les dejo un breve Koan, el cual espero sirva como punto de partida para poder compartir varias tazas de te... pues con el café ya sabemos lo que ocurre. Disfrútenlo!


Nan-in, un maestro Japonés de la era Meiji (1868-1912), recibio la visita de un profesor de universidad que queria informarse sobre el Zen.
Nan-in le sirvio te. Lleno la taza de su visita hasta el borde, y siguio virtiendo mas te.
El profesor observo como el te llenaba la taza y se derramaba sobre la mesa hasta que no pudo aguantarse mas: "¡Esta rebosando! ¡No cabe nada mas!"
"Al igual que esta taza," dijo Nan-in, "usted esta lleno de sus propias opiniones e ideas. ¿Como le voy a enseñar Zen si no vacia primero su taza?"

viernes, 23 de septiembre de 2011

Ojos que no ven, corazón que no siente. Tercera Entrega. Estrabismo o dificultad a la hora de poner las cosas en perspectiva.


En el caso del estrabismo, el problema en sí no resulta en ningún tipo de ceguera, sino en la simple pérdida del paralelismo de los ojos. Los dos ojos no miran al mismo sitio, uno de ellos dirige la mirada al objeto que fija, mientras que el otro se desvía en otra dirección.
La desviación puede ser grande y entonces constituye un defecto estético llamativo, pero puede haber casos donde la desviación es muy pequeña y no se aprecia. Este tipo de estrabismo compensado (o "foria") puede pasar desapercibido, pero puede crear los mismos problemas de visión que las grandes desviaciones, particularmente desde el enfoque emocional.
La pérdida del paralelismo de los ojos va a indicar que la persona tiene un tipo de enfoque para sus relaciones familiares y otras para sus relaciones sociales. Hay “ciertas cosas” que les cuesta ver y poner en perspectiva. Recordemos que la perspectiva se logra como el resultado de la visión estereoscópica y al perder el paralelismo entre ambos ojos, automáticamente se afecta la percepción en perspectiva y la capacidad de reconocer efectivamente a qué profundidad se encuentran los objetos.
Otra consecuencia es la disminución de la agudeza visual pues uno de los ojos (el dominante, el que ve mejor) será el órgano que básicamente le envíe la información que el cerebro procesará y al tener menos información, será levemente menos precisa la visión.
En algunos casos podemos encontrar ambliopía, que es cuando la persona ve el filo de su nariz y tiene la sensación de estar viéndose el otro ojo. Aquí emocionalmente se reporta un esfuerzo inconsciente por ver una realidad diferente a la que es. El individuo flexibiliza muchos sus puntos de vista en un área significativa, perdiendo otros como consecuencia; esto ocurre con más frecuencia bajo situaciones estrés.
 Algunos estrábicos en su esfuerzo por compensar el defecto visual, sin darse cuenta, asumen posiciones anormales de sus cabezas, ladeándolas o inclusive inclinando ligeramente el cuerpo, lo cual nos habla de ese inconsciente descontrol y descompensación por la cual, en algunas situaciones quedan vulnerables o expuestos ante terceros sin quererlo. A veces, en este mismo proceso y como consecuencia de la inclinación, antes mencionada, la persona desarrolla mucha tensión en el cuello, la cual puede concluir en tortícolis. En estos casos, encontramos resistencia o dolor para ver hacia el pasado.

Otros estrábicos experimentan diplopía, o visión doble, lo que refiere a una incapacidad transitoria para concentrarse en una solo tema o en la dificultad para apreciar en su justa distancia los elementos que componen ese tema. Es como si, constantemente, se preguntara qué va dónde y luego cuestionara si efectivamente van ahí o debieran ir en otro lado mejor. ¿Qué hago con mi vida? ¿Esto es lo correcto? ¿Hasta cuándo debo seguir así o aquí?
 Con frecuencia encontraremos que el mal cálculo de las distancias físicas y emocionales se pone de manifiesto en forma de problemas de relación con los otros por no saber dónde ubicarlos, dónde están, dónde deben ir, afectivamente hablando; aunado a una vivencia de que a veces los otros son muy duros o muy ásperos en su trato y en consecuencia son injustos en esa reacción… hasta la próxima entrega.

martes, 20 de septiembre de 2011

Ojos que no ven corazón que no siente. Segunda Entrega. Astigmatismo y la ceguera en las relaciones significativas.


Si bien, como comenté en el artículo anterior, el problema del miope o hipermétrope radica en la distancia emocional que el individuo considera a nivel inconsciente como óptima para ver o dejar de ver lo que ocurre a su alrededor, en este caso el problema vendrá dado según el tipo de relación.
Etimológicamente, astigmatismo proviene del griego "a" sin, "stigma" punto; es un estado ocular que generalmente proviene de un problema en la curvatura de la córnea, lo que impide el enfoque claro de los objetos que se encuentran sobre los ejes verticales u horizontales ya sea que estos estén cercanos o lejanos.
La córnea, que es redonda, sufre un achatamiento en sus polos, lo cual produce distintos radios de curvatura en el eje del ojo, por ende cuando la luz llega al ojo, específicamente en la córnea, la imagen que se obtiene es poco nítida y distorsionada. En el astigmatismo, la magnitud del error de enfoque es diferente según el eje del meridiano de fijación, esto hace que los objetos se vean distorsionados.
Mayoritariamente el astigmatismo es de origen hereditario, pero también se puede producir por culpa de complicaciones en intervenciones quirúrgicas, traumatismos o enfermedades. Además de afectar la visión, puede producir dolores de cabeza o mareos, ya que el ojo intenta compensar el defecto con la acomodación, con el consiguiente esfuerzo muscular.
Existen diversos tipos de astigmatismo:
        Astigmatismo simple: aparece en un solo eje (vertical u horizontal)
        Astigmatismo compuesto: además de afectar a un eje se asocia a la miopía o la hipermetropía y suma ambas patologías tanto a nivel físico como emocional.
        Astigmatismo mixto: cuando un eje se enfoca delante de la retina (miópico) y otro detrás de la retina (hipermetrópico). 
La significación emocional del astigmatismo vendrá determinada por el eje afectado. Si el problema está en el eje horizontal, entonces la persona en cuestión tendrá dificultades para relacionarse con sus iguales (hermanos, pareja, compañeros de trabajo y todo aquel que esté desempeñando un rol similar al del individuo), a ellos los ve como inferiores o superiores invariablemente, ya sea atribuyéndole defectos o cualidades que no reconoce en sí mismo.
En cambio si el problema radica en el eje vertical, las dificultades estarán en las relaciones con los superiores y/o subordinados (como los padres o figuras de autoridad, hijos, empleados y personas a su cargo o que dependan de él o su directriz). Estas personas ven como más cercanas a sus subordinadas o sus superiores. Es muy típico observar a una madre que se siente amiga de su hija y que inclusive compite por su popularidad con los amigos de la hija en vez de mantener su rol ejemplar (1) o un empleado que asegura: mi jefe es mi “amigo” obviando que la relación inicialmente es de base laboral. (2)

Los astígmatas con problemas en el eje vertical además, tienen un problema a la hora de percibir las normas, por ello dirán frases como “toda regla tiene su excepción”, pues siempre verán y encontrarán atajos o alternativas a la hora de cumplir una norma propuesta.


Ahora el tema se complica cuando el defecto no viene dado sobre el eje vertical o el horizontal, sino que, viene en gradientes y el resultado es un ángulo perpendicular, en este caso, las personas distorsionan tanto las relaciones con sus iguales como las relaciones con las figuras de autoridad, entonces, encontraremos ofertas como la famosa operación colchón, en donde para lograr un ascenso en la carrera se vuelve pareja de su superior… lo cual, en resumen, es una distorsión de ambas relaciones.

(1)    Cuando me refiero a estas relaciones materno filiales, no hablo de aquellas relaciones en las que la madre logra ser confidente de su hija, sino  de aquellas madres que pierden de vista su rol de madre para verse como iguales e inclusive competir por la atención se su hija, en vez de mantener su rol de ente modelo, protector y proveedor.
(2)    Si bien hay relaciones laborales que se estrechan y vínculos que se desarrollan debido a la frecuencia del trato, en este ejemplo en cuestión, me refiero a aquellas personas que suelen ver a sus jefes como grandes amigos e inclusive a sus subordinados. Ser una persona afin, agradable, fiable y confidente no le va a cambiar su rol de empleado.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Ojos que no ven, corazón que no siente. Primera Entrega. Miopía e Hipermetropía, ceguera emocional y distancia


“Ojos que no ven corazón que no siente”. Esta frase neurótica resume mayormente la ingenua y neurótica expectativa de todo aquel que tiene algún tipo de patología visual. Así que si tienes lentes o conoces a alguien que usa lentes correctivos, te interesará saber que cosas no quiere ver.

Una persona con miopía tiene dificultades para enfocar bien los objetos distantes, lo que puede conducir también a dolores de cabeza, estrabismo e incomodidad visual. La miopía es frecuente pero no es el problema visual más común en el mundo, ya que la mayoría de la población es hipermétrope. Esto ocurre aún en países de alta incidencia de miopía, como los Estados Unidos, donde aproximadamente el 25% de la población  padece esta enfermedad. En países como Japón, Singapur y Taiwán, hasta una de cada tres personas adultas es miope.

Por lo general la miopía se desarrolla durante la niñez y adolescencia a medida que el ojo crece, haciéndolo de forma exagerada. Frecuentemente, es en la edad escolar cuando se hace evidente la mala visión de lejos: no se ve bien el pizarrón, no se reconoce la cara de las personas a cierta distancia o no puede leerse los anuncios hasta que ya están muy cerca. Al detenerse el crecimiento en la adolescencia, se detiene también la progresión de la miopía en la mayoría de los casos, permaneciendo estacionaria el resto de la vida.

Emocionalmente podemos hablar de una persona a la que le cuesta proyectarse hacia el futuro y que en ese momento de su vida encara una serie de toma de decisiones difíciles de ver y reconocer, por eso la visión borrosa a la distancia. Como contraparte, ve muy bien de cerca, por lo cual, verá efectivamente sus relaciones inmediatas y será propenso a desarrollar relaciones de apego y proximidad.

El gesto de bizqueo que se puede notar en alguno miopes nos habla del sobre esfuerzo por ver el camino y no perder el rumbo. Es su esfuerzo físico y emocional por mantener una buena perspectiva de lo que ocurre en su entorno significativo.

Ese esfuerzo visual vendrá en muchas ocasiones acompañado por un dolor de cabeza que refleja el conflicto interno del individuo resumido en pensar, pensar y pensar y no actuar acorde o no tomar las decisiones  oportunas, en este caso  las ideas ya no son del todo  funcionales.

Por otro lado, tenemos a la gente que sufre de hipermetropía, que de hecho es la mayoría de la población. Estas personas experimentan dificultad para ver a su entorno inmediato, es decir, no pueden ver bien de cerca. El hipermétrope prefiere y necesita cierta distancia que le permite una mayor acomodación y perspectiva física y emocional.

Al contrario que el miope, el hipermétrope es un excelente planificador y puede ver eficientemente a la distancia, lo que se puede extrapolar como su visión a futuro. Sin embargo, por evidente que le resulte a otras personas le cuesta y en algunos casos es incapaz de reconocer lo que ocurre en su entorno inmediato.

Así que por un problema meramente óptico, de enfoque y perspectiva, si por casualidad tenemos una pareja formada entre un miope y un hipermétrope tendremos un choque de perspectivas y de necesidades en donde uno se ve muy claro a futuro pero no sabe como dar el primer paso y el otro ve perfectamente la cotidiano y lo inmediato pero no puede ver a donde va la relación.

Por ejemplo, tendríamos una persona (miope) que dice “amor de lejos, felices los cuatro” pues no entiende, no puede ver bien como la distancia física posibilita una relación de pareja en oposición de una persona (hipermétrope) que pide un poco de “espacio” y “distancia” no por que ame menos a su pareja, sino porque se siente ligeramente sofocado. 

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Aproximación emocional al cáncer de género. (Cáncer de mama y de próstata)


“Yo soy mi cuerpo, la vida se disfruta y se vive en el cuerpo, la vida es energía” W. Reich



Generalmente cuando se habla de cáncer se consideran tres factores como elementos constantes: el antecedente familiar (la carga genética), los hábitos (alimenticios, tabáquicos y el sedentarismo o ejercicio que se haga) y el componente emocional. En este particular, los antecedentes históricos y los hábitos son elementos o condicionantes necesarios mas no suficientes, sin embargo, el desencadenante emocional será el factor clave e indispensable para que un individuo desarrolle cáncer.

Chiozza plantea que sin la existencia de determinada configuración psíquica no existe la posibilidad de enfermar de cáncer. Podríamos hablar de ese trastorno de conversión Freudiano pero llevado a un extremo un poco mayor.
¿Pero, en sí que es el cáncer? pongamos esto en palabras llanas para poder exponer la idea de forma sencilla. Según el Nacional Cáncer Institute, refiere a la proliferación de células anormales sin control que pueden invadir otros tejidos.
Entonces, ¿Por qué unas personas desarrollan cáncer?, ¿Por qué algunos fumadores activos con pésimos hábitos nunca desarrollan cáncer y otros fumadores pasivos, con buenos hábitos  tienen cáncer de manera fulminante?
Veamos esto bajo la perspectiva emocional, es decir, que pasa cuando “eso” que bajo nuestra perspectiva nos define se nos acaba… entonces, intentamos algo diferente y eso tampoco resulta, luego, probamos otra cosa y finalmente después de una serie de intentos nos encontramos desesperanzados… ese es el desencadenante que le da la bienvenida al cáncer. Es la forma que tiene nuestro cuerpo de decir “cuando hacer mas de lo mismo ya no me sirve y no se que mas hacer, lo he intentado todo.”
Sin embargo, al igual que Chiozza, coincido en que a veces la persona “puede descubrir” lo que está por ocurrir o lo que está pasando y detener el proceso cuando todavía no ha entrado en una fase irreversible. Es el individuo el que tiene la clave definitiva de su propia enfermedad. Y esta clave está tan escondida para él como para quienes quieren tratarlo. La persona, la parte de la persona que cree padecer la enfermedad, no sabe que es justamente ahí donde está el verdadero mensaje que no fue escuchado. Comúnmente el ser humano se enoja con aquella parte de su cuerpo que le muestra limitación o lo molesta como se siente de alguna manera.
La desesperanza sazonada con soledad, incomunicación, aislamiento, un poco de desinterés en los otros, falta de participación en la comunidad, y falta de curiosidad en la vida, genera una pérdida del entusiasmo y del significado de los actos del vivir, que desemboca en la hipocondría, en el temor a la ruina en el terreno de la salud o del dinero, en el tedio, o en el sentimiento de vacuidad y de fracaso… y en el particular de hoy, en el hecho de haber fracasado como mujer o como hombre.
Entonces, sólo para cubrir los lugares comunes y estadísticamente más frecuentes. Hay mujeres que son socializadas para ser madres, su definición de género reside en el hecho de la maternidad, así que mientras está rodeadas de sus hijos son plenas, pero cuando se enfrentan al Síndrome de Nido Vacío y sus hijos se van de casa, pues ellas no sirven como mujeres así que presentaran cáncer al seno izquierdo. Por qué el izquierdo, pues si recordamos el tema de lateralidad notaremos que las relaciones consanguíneas se manifiestan en el lado izquierdo del cuerpo y por qué el seno, pues es la parte del cuerpo que la define como mujer y que le permite ser nutritiva. Esto también le puede ocurrir a aquella mujer que se siente desesperanzada ante la posibilidad de tener un hijo.
Sin embargo, por otro lado hay mujeres, inclusive en nuestros días, que son criadas para ser “las esposas de”… entonces, mientras estén casadas son plenas,  al menos como mujeres cumplen con rol. Pero, cuando sobreviene el divorcio o el abandono ellas se sienten descalificadas o menos preciadas como mujeres y eso en muchas ocasiones hace que se su instinto se vuelva en contra de ellas mismas, así que tendremos una mujer que desarrolla cáncer en el seno derecho.
En cambio, habitualmente el hombre se define como proveedor y “casualmente” el cáncer en los hombres ocurre cercano a los 50 años (aunque ese rango etáreo está disminuyendo cada día mas) cercano a esta edad está también el retiro. Así que, si el hombre no puede ser proveedor, pues a nivel inconsciente no es hombre y por ello puede desarrollar cáncer de próstata.
Para Lowen la “voluntad de vivir” es distinta que el “deseo de vivir”. El “deseo de vivir” corresponde al aspecto psicológico del instinto biológico, y es esa fuerza entusiasta que busca la expresión y la satisfacción. La “voluntad de vivir” surge de otro estrato de la personalidad, surge de la necesidad de defenderse del “deseo de morir”.
Algunos consejos para evitar el cáncer, al menos de género, en nuestro futuro  es: chequeen cómo definen ustedes a la mujer y al hombre y si hay algo en esa definición que sienten que no pueden cumplir o no saben cómo hacerlo,  pidan nuevas definiciones y dense el permiso de hacer las cosas de manera diferente, muy diferente y si eso también se les agota como alternativa, pues hagan otra cosa, pero nunca se den por vencidos… el compromiso es con la vida! 

domingo, 11 de septiembre de 2011

“La enfermedad es el esfuerzo de la naturaleza por curar el cuerpo.” Es justo lo que necesitaba pero no entendía.




 

Con esta frase Junguiana quiero invitarlos a escuchar con un poco mas de cautela a su cuerpo y en alguno de los casos, quizás, tratarlo como tratan a sus carros.

Desde el enfoque de la bioenergética, nada de lo que ocurre en nuestro cuerpo es “casual” sino “causal,” es por ello, que la creencia popular que reza “enfermarse es siempre malo!” es errónea; más que malo enfermarse tiene un costo, un costo físico que compensa en términos psicológicos un costo emocional de una realidad subjetiva que resulta más difícil, angustiante o dolorosa de soportar.

Sin embargo, la enfermedad no es más que la manifestación de un síntoma o conjunto de síntomas que son la voz de nuestro cuerpo, son la alarma que nos está indicando que hay algo que debemos arreglar o ajustar.

Justamente aquí radica la importancia de escuchar bien a nuestro cuerpo y dejar la prisa por aplacar los síntomas como manifestaciones molestas que interrumpen la homeostasis regular de nuestro organismo para pasar a tomar atención en lo que hay detrás de cada malestar.

Pues, el síntoma lo podemos aplacar mil y una vez con analgésicos y afines pero este seguirá apareciendo o incrementándose siempre y cuando la causa físico-emocional que lo genera siga existiendo. Sin embargo, si en vez de  ocuparnos de aplacar las manifestaciones sintomáticas molestas nos ocupáramos de escuchar lo que nuestro cuerpo nos está diciendo y tomáramos correctivos necesarios a nivel de nuestras relaciones significativas y de las cargas emocionales que llevamos encima, entonces, la aparición del síntoma habrá valido la pena” pues sirvió para solucionar la raíz del problema que hacía eco emocional.

El común denominador de la gente no duda en consultar al médico, dentista o al oftalmólogo, sin embargo la idea de consultar a un psicólogo o a un terapeuta genera enormes niveles de reserva y por lo general suele venir acompañado de considerables niveles de angustia y estrés. La realidad es que el trastorno no es más que el resultado de un fracaso en un proceso de adaptación y en tanto  no es una desgracia, sino más bien, algo que puede ser totalmente tratable y transitorio.

Mírenlo de esta manera, cuando a su automóvil se le enciende alguna luz en el tablero, no nos molestamos con la luz por decirnos que debemos poner gasolina, aceite, cambiar el alternador o revisar el motor, sino que nos alegramos del aviso y hacemos algo antes de que el motor de dañe permanentemente.

La gente no piensa: “mejor déjame quitarle el bombillo a la luz del tanque de gasolina así se apagará y dejara la alarma”. El razonamiento suele ser: “busquemos una bomba y pongamos gasolina o llevemos el carro al taller.”

Cuando la alarma o el síntoma aparece en términos personales, por lo general la ocupación suele ser atacar el síntoma en vez de evaluar por completo la situación y tomar acciones que permitan erradicar la  causa que genera el síntoma. Así que la próxima vez, tratemos a nuestro cuerpo al menos tan bien como tratamos a nuestros carros y atendamos a la raíz del síntoma.

jueves, 8 de septiembre de 2011

El lenguaje del cuerpo. El mono desnudo

Definitivamente el determinismo cultural del que Darwin habla, Desmond Morris lo reafirma al mostrarnos en esta versión audiovisual de su libro El mono desnudo, como un mismo gesto, por ejemplo un aro formado por nuestros dedos pulgar e índice mientras los otros dedo apuntan hacia arriba, puede significar "cero" en Francia, o es el símbolo de la "OKeidad" para los anglosajones o en el caso de los latinoamericanos si lo ponemos boca abajo emula al ano, por lo cual se entenderá como un símbolo para señalar la homosexualidad de algún hombre.

Les invito a relajarse y regalarse un tiempo para ustedes y ver este maravilloso compendio gestual que les dará luces de por qué al viajar a veces tenemos las mejores intenciones y nuestros gestos terminan diciendo algo totalmente opuesto y metiéndonos en problemas. Disfrútenlo!






Hasta la próxima entrega.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Las caricias diferidas, mi primer ingenuo café erótico



Dentro del ritual de cortejo uno de los factores más importantes y quizás uno de los hechos más instintivos y primarios son las caricias diferidas. Aprender a reconocer y ofrecer un conjunto adecuado y oportuno de caricias diferidas en muchas ocasiones será la diferencia entre tener una siguiente cita o no. Los primates, tienen una cópula indiscriminada que dura aproximadamente ocho segundos. 



El ser humano necesita pasar por un largo proceso de cortejo, aunque al final subyace el elemento primitivo y la pulsión que busca conseguir a una pareja “ideal” con quien copular y ojalá procrear.
Humanizar el proceso de encuentro ha hecho que el mismo se vuelva cada vez más y más complejo y procurando, sobre todo para el individuo urbano, una lista interminable de condiciones a cumplir. Afortunadamente, el instinto se sobrepone al protocolo social y deja colar ese lado animal que aboga por el placer sexual.
Otra diferencia que tenemos con los primates es que nosotros tenemos sexo por placer y no sólo para procrear y es por ello que las caricias diferidas son tan importantes y tan características de ritual del cortejo. Estas comprenderán ese conjunto de gestos y mímica que emulan todo aquello que podemos hacer en la intimidad.
Echémosle un vistazo a ese café con un amigo a mitad de tarde, a simple vista nada erótico, sin embargo si miramos con más detalle notaremos que dicho encuentro está muy cargado de erotismo y sensualidad. Haciendo a un lado la galantería que fue necesaria para llevar a esta pareja hasta esa mesa notemos como, casualmente, la chica toma una cucharilla o un palillo para remover el azúcar de su café, es decir, como toma un elemento fálico para remover dentro de un agujero tibio.
Posteriormente, existe la posibilidad que ella ingenuamente lleve dicho símbolo fálico a su boca para probar si el café está lo suficientemente dulce, lo cual es a su vez una manera de decirle al instinto del hombre: “mira lo que pudiera hacerte a ti más tarde si te portas bien y cumples con mis expectativas”. El responderá haciendo lo mismo, echándole azúcar a su café, revolviéndolo y tomando un sorbo; es decir, diciéndole: “pudiera ser yo el que esté acariciando una cavidad húmeda y tibia y si te portas bien también podría llevármela a la boca”.
Sabremos si estas primeras caricias han sido bien recibidas y entendidas, pues nuestro interlocutor se inclinará levemente hacia adelante, acercará su cara  hacia el centro de la mesa, ladeará levemente su rostro dejando expuesto su cuello y particularmente evidenciará un dilatamiento de pupilas que lo hará lucir deslumbrado.
Si estas primeras ofertas son aceptadas, notaremos como alguno de los dos comenzará a hacerle unas leves caricias al mantel, como si estuviera siguiendo el tejido del mismo o mejor aún acariciará el borde del plato o de la taza, ratificando la intención antes expuesta. Entonces vendrá un corte, un freno y un distractor… “mesonero agua fría o un refresco por favor!
Acaba de notar que hace calor y necesita refrescarse. Posiblemente ahora, luego de un leve distanciamiento de los cuerpos, comencemos de nuevo el juego, solo que ahora nuestra dama en cuestión llevará a su boca un pitillo que sale de un sudoroso y fresco vaso de bebida fría.
En este pequeño descanso notaremos como a su vez aparecen leves gestos de acicalamiento, como acomodarse el cabello, planchar el mantel y ordenar los cubiertos, estirar mi ropa para que no se vea ninguna arruga y similares. Se quiere lucir bien para el otro.
Ahora podemos pedir algo para picar, pues quizás sea momento de meter algo… en el estómago! Y asimilar lo que no están ofreciendo y lo que estamos aceptando, además de ratificar con la comida otro cúmulo de caricias de la misma índole.
Cuidado! Si alguno de estos gestos no es bien recibido aparecerán otro tipo de caricias diferidas… las que llevan a las aclaratorias o amenazas. El que se encuentre desagradado con algo de lo que vio o dijo el otro, súbitamente tendrá una necesidad de limpiar las migas del mantel, ordenar algunas cosas, apagar con fuerza un cigarrillo en el cenicero, quitarle la pelusa al suéter y cosas por el estilo. Es decir, necesito limpiar el terreno y quitar la basura del medio.
Si este tipo de caricias aparecen acompañadas con un distanciamiento corporal, un ceño fruncido, tensión en el maxilar inferior, una posible queja sobre una molestia “casual” en el cuello o nuca; entiendan amigos que nuestro interlocutor está realmente molesto!
Ahora, si no hubo migas y pelusas que quitar y llegamos a un postre en tono suave de voz, hablando de cosas agradables, riendo, comentando nuestras proezas y destrezas, cotejando esas cosas que tenemos en común y posiblemente habiendo tenido algún roce eventual y por casualidad con el otro, entonces, prepárense para la próxima cita.



domingo, 4 de septiembre de 2011

Biologia del amor

Regálense un tiempo para ustedes, permítanse un escape y disfrutar del trabajo de Desmod Morris, es uno de estos grandes observadores del mundo del hombre, que tiene varias virtudes... paciencia, una asombrosa capacidad de síntesis y una manera grácil y clara de decir y explicar las cosas. Les invito a disfrutar de la Biología del amor de boca del mismo Desmond.

Aquí nos enteraremos actuando como animales y apelando al instinto para conseguir pareja, acicalándonos, danzando y merodeando al otro significativo como parte del ritual de cortejo. También veremos todo los que somos capaces de hacer para lograr copular, que si bien lo hacemos por placer, a diferencia de los animales, en todo lo demás tenemos incontables similitudes.

 













Hasta la próxima entrega...

viernes, 2 de septiembre de 2011

Cuando el cuerpo habla


Nuestro cuerpo suele ser mucho más sincero que nuestro discurso verbal e incluso, si sabemos manejar bien el conjunto de mensajes que enviamos con él, lograremos una comunicación mucho más efectiva y asertiva.

La comunicación corporal incluye un conjunto de códigos que intervienen en nuestra vida diaria, signos que de forma permanente inciden en nuestra comunicación. Este conjunto de signos que enviamos con el cuerpo, juega un papel fundamental  en el plano de nuestras relaciones, incluso de manera más contundente y reveladora que aquellos que podemos decir mediante la comunicación verbal.

De modo que, tanto los mensajes enviados con nuestro cuerpo (Kinésica), como la distancia entre el emisor y el receptor (Proxémica), el manejo del espacio, de los colores, etc, van armando todo un discurso que, sin audio, revela mucho de nuestra personalidad, del juego de poder y de los intereses que puede esconder un simple encuentro

DESCIFRANDO EL MENSAJE CORPORAL

El clásico cruce de brazos entendido universalmente como “estoy a la defensiva” o “estoy cerrado” a lo que se me plantea, puede tener matices de protección si a su vez, se cruzan sobre el pecho, cubriendo los órganos vitales, tanto en sentido orgánico como emocional.

“Algo instintivo y que se evidenció primero en la zoología antes que en las ciencias sociales es la exposición de las zonas vulnerables en los momentos de cortejo, zonas que, no casualmente son a su vez zonas erógenas. Cuando una pareja sostiene una conversación de corte intimista, en el momento que el interlocutor expone su muñeca y posteriormente su yugular evidencia empatía emocional a tal punto de darse el permiso de ser y mostrarse vulnerable”.

LA MEDIA LUZ DE AMOR

Dentro de los gestos de cortejo, los encuentros a la luz de las velas son todo un clásico, un obligado. La explicación no es otra que, las pupilas se dilatan cuando una persona ve algo que le gusta y posteriormente se contraen según el nivel de luz del ambiente; entonces la media luz pretende generar de antemano la sensación de agrado. La ausencia de la luz hace que el sentido de la vista, que provee un 80 % de la información que manejamos para interactuar con el entorno, sea un poco menos importante, invitando así a explorar otras sensaciones.

Luego se da lugar a las conocidas caricias diferidas, como una promesa de lo que puede suceder si el intercambio de códigos funciona para ambos. Las mujeres mordisquean pitillos, cigarrillos y demás símbolos fálicos que tengan a mano; los hombres las bocas de los vasos, acariciando las tazas y similares”. La caricia diferida se vuelve una oferta simbólica de lo que podría pasar si la relación continúa de buena manera, es una forma silente de decir “esto te lo podría estar haciendo a ti… te interesa? Entonces continúa!”


LA PROXEMICA Y EL ÉXITO EN LA RESOLUCION DE CONFLICTOS

Sentarnos de frente a alguien,  implica confrontación pues como es adentro es afuera y los puntos de vista opuestos llevan a confrontaciones más temprano que tarde. Si preferimos colocarnos al lado del otro, buscamos aliarnos y lograremos empatía. Además, debido al cómo se procesan neuronalmente los estímulos, podemos saber que cuando se habla del lado izquierdo, el 75 % de la información la procesa el hemisferio derecho, por lo cual, el contenido relacionado con la familia y con las emociones se procesará mas rápida y efectivamente, así como aquello relacionado con los instintos. En cambio, cuando hablamos del lado derecho de nuestro interlocutor, los contenidos serán mas efectivos si están vinculados con lo técnico, lo abstracto, si están ordenados y estructurados congruentemente y si refieren a lo social.

Más allá de nuestro discurso verbal, incluso de nuestras acciones, récord académico y desempeño laboral; el cómo manejamos el discurso corporal nos puede llevar al logro de metas y al manejo de situaciones conflictivas de manera eficaz y productiva”.

Esta comunicación puede realizarse a través del conjunto cabeza, cara y cuello, el contacto visual, la postura corporal, los gestos, la dirección en que apuntan los pies y las piernas, la orientación del cuerpo, los gestos de la boca, el tono y ritmo de la voz, la distancia corporal, la forma de llevar el cabello, el uso del olfato hasta llegar al tacto y la piel.

En el terreno de la imagen pública, el lenguaje corporal se contempla en función de su utilidad para proyectar una buena imagen que proporcione seguridad en uno mismo y así comunicar confianza para provocar la credibilidad en nuestra persona y en nuestros actos.

 Aquí les dejo algunos tips sobre qué pueden comunicar las posiciones de nuestro cuerpo

Cabeza, cara y cuello:

Ubicación de la cabeza
Qué significa
Se lleva hacia adelante
Atención, cariño, violencia
Se lleva hacía atrás
Espera, duda
Moverla hacia al interlocutor
Atender
Moverla en sentido contrario a donde
se encuentra el interlocutor
Distracción, indiferencia
Inclinada hacía adelante
Rabia, seguridad, sumisión (baja)
Inclinada hacía atrás
Miedo, resistencia, duda
Inclinada hacía un lado
Escepticismo, incredulidad, vanidad, vulnerabilidad y afinidad

Las piernas y los pies.

Ubicación de las piernas
Qué significa
Piernas muy abiertas
Arrogancia, imposición, protección y disponibilidad
Piernas poco abiertas
Seguridad, corrección, educación, moderación
Muy juntas
Tensión, miedo, nerviosismo, reserva
Sentados y poco abiertas
Control de sí mismo, relajamiento
Sentados y muy abiertas
Mucha confianza, despreocupación
Sentados y juntas
Tensión, temor, cautela
Sentados y cruzadas
Comodidad pero también inseguridad o reserva

 Fragmento tomado de la entrevista de Alida Vergara de Abril 2010 para la Revista Estética y Salud a José Gabriel Rodríguez Aristegui.

Estrategias básicas de seducción


El sexo es altamente importante para las personas deambos géneros, la mayor diferencia quizás refiere en el permiso histórico quehemos tenido los hombres para asumir dicho deseo e ir tras él. En cambio, las mujeres han tenido que reprimir muchas veces ese deseo y es desde hace un corto tiempo para acá que han tenido más permisos sociales para ser responsables de sus deseos e impulsos.

Así que, a continuación les comento algunos elementos que históricamente se consideran atractivos para el sexo opuesto:

La atracción entra por los ojos, al menos el deslumbrante encanto inicial que te permite captar la atención de esa persona deseada. Si bien hay personas que lucen muy bien con esa apariencia desaliñado y casual, la verdad es que la belleza y alguien acicalado es másatractivo independientemente de la raza, credo, cultura o estrato social.

El poder es magnético, ambos sexos tienen una fascinación por los puestos de poder. Sin embargo, latradición dice que le corresponde al hombre ostentar un puesto de poder para ser más atractivo y a una mujer ser apoyo o ente de influencia (Sin ánimo alguno de sonar machista, solo cito las tendencias históricas prevalentes hasta la fecha).

Curiosamente, las mujeres con carácter muy firme y altamente capaces, que además, ostentan cargos de poder suelen intimidar y espantar al promedio de los hombres. En el caso de las mujeres, el recurso usado por excelencia es jugar al rol la “dama que necesita serrescatada.”

El hombre promedio adora ser osentirse el héroe que acude al rescate y lo logra!
La mujer promedio gusta ser rescatada, preferiblemente por su príncipe azul!

Un hombre que sabe lo que quiere y se sabe mover socialmente para lograrlo es altamente atractivo para las mujeres. Ahora, cuidado amigos, hay una enorme diferencia entre saber lo que se quiere y comportarse como un patán.

Si bien todos conocemos a mujeres hermosas y capaces que han estado con patanes, ellos no son bien recibidos y es gracias a ellos que cuando una mujer es bien tratada (léase, tratada conrespeto y galantería, sin volverse una suerte chupa medias) se agradece profundamente dicho trato y las mujeres responde con afecto.

Según estudios realizados a principios del 2011 los hombres que lucen seguros, inclusive arrogantes son apreciados como más atractivos y las mujeres son percibidas como más bellas mientras mas vulnerables y sensibles parecen.

Por otro lado, las mujeres frecuentemente consideran como atractivos a los hombres que son considerados como atractivos por otras mujeres, así que, un hombre acompañado generalmente recibirá más miradas femeninas que si estuviera solo. En el caso del hombre la tendencia es al revés, una mujer sola es mas tentadora y apetecible.

El hombre en su fuero instintivo prefiere “pelear”, por el derecho de estar con esa mujer, con otros hombres que estén en condiciones similares y no “pelear” con otro hombre que ya tiene su territorio marcado. De hecho, las mujeres gozan cuando se sienten deseadas y posteriormente se potencia ese gozo si una vez consolidada la pareja se sienten seguras y protegidas por esta.

A la mujer, si se le pregunta abiertamente al respecto, dirá que prefiere un hombre soltero una y mil veces, pero en silencio codiciaráa “ese” hombre que está con otra y debatirá con su amiga confidente lo que ella haría si pudiera estar con él.

Podemos decir que las mujeres prefieren a los hombres varoniles, fuertes (no físicamente, sinocomo carácter), seguros, ligeramente arrogantes, que saben lo que quieren,capaces que además son gentiles, caballerosos, atentos y que logran hacerlas sentir únicas. Las mujeres adoran el sentido de unicidad, así que si logras esto muy posiblemente no importa si eres bajito, gordito y tímido…

Por su parte, lo hombres prefieren a las mujeres femeninas, bellas y coquetas (sin rayar en lo trivial). Un hombre por lo general no lo admitirá, pero si una mujer además de ser su amante logra ser su amiga, es decir, logra ser esa persona que le da apoyo y ánimo, el será muy feliz. En este último tópico la mujer realmente tiene una profunda necesidad de ser escuchada y tomada en cuenta en sus necesidades y aquí falla el promedio de los hombres.

Por otro lado, los hombres desean ser apoyados y vitoreados en sus empresas, pero inclusive más importante que eso, muchas veces es, el celo particular por eso que ellos entienden como “su espacio”, así que querrán salir con sus amigos o participar de alguna actividad gregaria sin que ello signifique desamor. En cambio, la mujer promedio mientras más evoluciona la relación más tiempo querrán pasar con sus parejas, casi como sifueran siameses.

Consejo final para ambos géneros, háganse desear… si son muy fáciles, serán algo pasajero. En cambio si al otro le costó estar con ustedes, entonces serán más valorados.