Paúl Eckman reconoció a la expresión facial como uno de los medios más importantes de la comunicación no verbal. Como es sabido al menos un 56% de la comunicación reposa en la parte kinestésica (gestual) y tan solo entre un 7 a un 10 % en el contenido verbal. Sin embargo, hay gestos que podemos socializar o aprender para “lucir” fehacientes y así poder mentir descaradamente, pero, las micro-expresiones nos delatarán.
A través de la cara podemos comunicar el grado de inclinación, interés o implicaciones hacia una persona o situación; el estado emocional de los interlocutores.
La cara es también un “sensor” instantáneo de cuantos cambios acontecen en una interacción social, constituyéndose en un feedback efectivo para cada interlocutor de si lo que se dice está siendo comprendido de forma sucinta
La congruencia entre lo dicho y los gestos que lo acompañan nos permitirán saber si nuestro interlocutor está diciendo la verdad o miente hábilmente. Las microexpresiones son breves expresiones faciales involuntarias que el rostro muestra cuando sentimos cada una de las distintas emociones. Estas 7 microexpresiones son universales, son las mismas sin importar género, cultura o lugar geográfico. Todos mostraremos el mismo gesto al sentir: disgusto, rabia, miedo, tristeza, alegría, sorpresa y desprecio.
Nadie puede mentir las microexpresiones y aunque estas duren fracciones de segundo, cualquier persona puede aprender a reconocerlas.
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